Indignación, bronca y, sobre todo, tristeza. Mucha tristeza genera ver el presente institucional que vive Estudiantes. Con cada vez más casos que salen a la luz acerca de extraños faltantes de dinero en las arcas del club, que se produjeron durante la gestión de la actual dirigencia, el club vive uno de los peores momentos de su historia.
Un par de horas después de finalizado el empate frente a Sarmiento en Caseros, cerca de un centenar de socios se acercaron a la sede ubicada en Devoto para conocer al único que, hasta ahora, presentó un proyecto para la institución y demostró interés en hacerse cargo de dirigir a Estudiantes. Hablamos de Eduardo Rossetto, quien de modo conciso explicó las ideas que tiene para el futuro si alcanza la presidencia "pincha", repartió un resumen por escrito para que la masa societaria pueda conocer y estudiar con tranquilidad sus propuestas, y por último pidió que se pase a cuarto intermedio --aprobado por los socios--, para así en diez días dar a conocer la lista de personas que lo acompañarían, en caso de convertirse en presidente, en la dirección del club; y luego, tras completarse 35 días, la dirigencia convocará a una nueva Asamblea Extraordinaria donde se definirá si Rossetto será el elegido por la gente o no.
Después de aceptar el pedido de Rossetto, la actual Comisión Directiva de la institución dio por terminada la Asamblea y allí fue cuando el ambiente se puso caliente. Los socios querían respuestas: ¿A Estudiantes le corresponde cobrar algo por los derechos de formación de Ezequiel Lavezzi?. Parece que sí, ¡¡¡Pero nuestros inocentes directivos no lo sabían!!! (?). ¿Estará depositada y pendiente de cobro esa plata? ¿O también se la llevó el ex presidente, ladrón de guante blanco que trabaja sin cómplices en sus turbias movidas?. Además, ¿Quién va a hacerse cargo de todo el dinero del club extraído por el supuesto único culpable Pablo Rogé?. Los dirigentes no respondieron. La temperatura comenzó a subir en la pequeña sala y algunos le hicieron sentir la presión, como nunca, al presidente Roberto Pancaldi y al tesorero Orlando Morenza, principalmente.
Afortunadamente se calmaron los ánimos y la Asamblea llegó a su fin. Los asociados se fueron sin respuestas, con mucha bronca, impotencia e indignación. Pero con la ilusión de que lo de ayer sea el comienzo de un cambio en la vida del Club Atlético Estudiantes.
Descargá desde SoyCaseros el Proyecto presentado por Eduardo Rossetto. (Formato PDF)
Un par de horas después de finalizado el empate frente a Sarmiento en Caseros, cerca de un centenar de socios se acercaron a la sede ubicada en Devoto para conocer al único que, hasta ahora, presentó un proyecto para la institución y demostró interés en hacerse cargo de dirigir a Estudiantes. Hablamos de Eduardo Rossetto, quien de modo conciso explicó las ideas que tiene para el futuro si alcanza la presidencia "pincha", repartió un resumen por escrito para que la masa societaria pueda conocer y estudiar con tranquilidad sus propuestas, y por último pidió que se pase a cuarto intermedio --aprobado por los socios--, para así en diez días dar a conocer la lista de personas que lo acompañarían, en caso de convertirse en presidente, en la dirección del club; y luego, tras completarse 35 días, la dirigencia convocará a una nueva Asamblea Extraordinaria donde se definirá si Rossetto será el elegido por la gente o no.
Después de aceptar el pedido de Rossetto, la actual Comisión Directiva de la institución dio por terminada la Asamblea y allí fue cuando el ambiente se puso caliente. Los socios querían respuestas: ¿A Estudiantes le corresponde cobrar algo por los derechos de formación de Ezequiel Lavezzi?. Parece que sí, ¡¡¡Pero nuestros inocentes directivos no lo sabían!!! (?). ¿Estará depositada y pendiente de cobro esa plata? ¿O también se la llevó el ex presidente, ladrón de guante blanco que trabaja sin cómplices en sus turbias movidas?. Además, ¿Quién va a hacerse cargo de todo el dinero del club extraído por el supuesto único culpable Pablo Rogé?. Los dirigentes no respondieron. La temperatura comenzó a subir en la pequeña sala y algunos le hicieron sentir la presión, como nunca, al presidente Roberto Pancaldi y al tesorero Orlando Morenza, principalmente.
Afortunadamente se calmaron los ánimos y la Asamblea llegó a su fin. Los asociados se fueron sin respuestas, con mucha bronca, impotencia e indignación. Pero con la ilusión de que lo de ayer sea el comienzo de un cambio en la vida del Club Atlético Estudiantes.
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1 comentario:
por que no arman una lista todos los que como vos la tienen tan clara y se dejan de romper las pelotas.
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