Estudiantes sabía de antemano que el encuentro de esta tarde ante Defensores de Belgrano no iba a ser para nada fácil ni se le iba a presentar tan sencillo como los últimos enfrentamientos que le tocó disputar como local.Es por eso que, teniendo en cuenta lo parejo y peleado que fue el partido en todos los sectores del campo de juego, y sumado a que Almirante Brown y Atlanta --rivales directos en la pelea por entrar al Reducido-- tampoco pudieron ganar, el 1 a 1 parece un resultado que no le sienta nada mal al "Pincha", puesto que gracias al punto obtenido se mantiene en puestos de clasificación.
Desde el primer minuto los de Leo Ramos salieron a buscar una victoria que les permitiera seguir ubicados dentro de los nueve primeros de la tabla. A pesar de haberse puesto en ventaja rápidamente gracias al cabezazo de Cristian Lillo, a los 11 minutos, el local no pudo concretar ninguna situación de peligro más y cuando sólo restaban cinco minutos para la finalización de la primera etapa, el "Dragón" llegó a la igualdad por medio de Ramiro López.
Ya en el complemento, al equipo de Caseros se le tornó aún más complicado superar a la visita debido a la temprana expulsión de Facundo Bazán, a los ocho minutos. Al quedarse con un hombre menos, el entrenador local mandó a la cancha a Hernán González por Sergio Sagarzazu, parando un 3-3-3 con la intención de que sus dirigidos consiguieran el segundo tanto.
Sin embargo, al darse cuenta que con el transcurso del tiempo el equipo no era efectivo en ofensiva --ni siquiera con el ingreso de Facundo Pereyra--, Ramos prefirió cuidar el 1 a 1 que al fin y al cabo terminó siendo un buen resultado. Un empate que sirvió para estirar la racha invicta a siete presentaciones, continuar en puestos de clasificación al Reducido y, sobre todo, para que los hinchas de Estudiantes sigan soñando.
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